El día 16 de febrero fuimos al parque de las ciencias. Primero fuimos al planetario donde nos pusieron un vídeo de la evolución. Desde la aparición de la Tierra hasta el ser humano. En ese vídeo descubrí que nuestro planeta cuando se estaba formando fue golpeado por un meteorito del tamaño de Marte y que casi lo pulveriza. Si ese meteorito hubiese sido más grande ahora el planeta estaría esparcido en pedacitos por la galaxia y nosotros no existiríamos.
Después fuimos a varios pabellones del edificio. Como Eureka. Lo que más me gustó fue las aves rapaces. El hombre que estaba allí nos preguntó que cuando ven mejor los búhos, que fue el primer ave que nos enseño. Todos contestamos al unísono
¡Por la noche! Y, resulta que ven mejor de día. Y yo pensando que tenían una especie de visión infrarroja...
También vimos los diferentes pabellones de las exposiciones temporales.
Había uno sobre animales, del cuerpo humano... pero la que más me gustó fue la del cuerpo humano. Había un esqueleto, una especie de cámara térmica que muestra las partes frías y calientes del cuerpo, dos cinturas para adivinar cuál era la femenina ¿Sabes cuál? Es la mas ancha, porque si fuese estrecha el bebé al nacer no cabría. También había dos tubos que hacían de branquia femenina y masculina. La más grave es masculina, la aguda femenina.
Había también algo un poco asqueroso... era un vídeo del parto. Y mira que tanto decirnos que no le toquemos la cabeza a los bebés que la tienen muy sensible ¡Y resulta que la enfermera va y le agarra de la cabeza para sacarlo¡ Pero... ¿Sabes por que la tienen sensible? Porque los adultos tienen los huesos del cráneo unidos ¿No? Pero los recién nacidos, para que le crezca esos huesos los tienen separados.
Fabián González Martín 6A
